Despliegan Operativo Cerrojo en el Puente Rosario – Victoria para Proteger a Entre Ríos del Narcotráfico.
En una acción sin precedentes, los tres niveles del Estado y las fuerzas de seguridad han puesto en marcha un operativo cerrojo en la cabecera del puente Rosario – Victoria con el objetivo de impedir que el narcotráfico ingrese a la provincia de Entre Ríos. Esta medida surge como respuesta a la expansión de la criminalidad narcotraficante que ha sacudido la apacible vida de la ciudad de Victoria, afectada por la ola delictiva proveniente de Rosario.
El contraste entre estas dos ciudades es notable: mientras Rosario es una urbe cosmopolita con más de un millón de habitantes, Victoria es una comunidad pintoresca de 40 mil personas donde todos se conocen. Sin embargo, esta tranquilidad se ve amenazada por la creciente presencia del narcotráfico, y es por eso que el gobierno, liderado por el gobernador santafesino Maximiliano Pullaro y respaldado por el gobierno nacional de Rogelio Frigerio, ha decidido tomar medidas concretas para evitar que Victoria se convierta en víctima del llamado «efecto cucaracha».
Según Néstor Roncaglia, ex jefe de la Policía Federal y actual ministro de Seguridad entrerriano, cuando se incrementa la presión del Estado sobre la narcocriminalidad en determinada región, es común que los delincuentes busquen nuevos territorios donde operar. Ante esta situación, Entre Ríos se presenta como un objetivo potencialmente atractivo para las bandas narcocriminales en búsqueda de refugio. Por ello, se ha desplegado un control permanente en el puente Rosario – Victoria, con grupos especiales de la Policía y la Brigada Canina, con el fin de prevenir el ingreso de armas y drogas a la provincia.
El compromiso de proteger el estilo de vida de los habitantes de Victoria es firme. La intendenta Isa Castagnino, junto con las fuerzas de seguridad, se encuentra trabajando arduamente para mantener la seguridad y tranquilidad en la comunidad. Aunque existe cierta preocupación entre los vecinos, estos se muestran decididos a defender su cotidianidad y evitar cualquier asentamiento del narcotráfico en la zona. Para ello, se han implementado medidas de monitoreo conjunto y se han fortalecido los sistemas de seguridad en la vía pública.
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La prioridad es clara: preservar la paz y la seguridad en Victoria, asegurando que los ciudadanos puedan continuar con su estilo de vida sin temor. «Victoria sigue siendo una ciudad tranquila y segura. Queremos conservar eso, resguardarnos, continuar con nuestra cotidianeidad de caminar por las calles a cualquier hora, que nuestros niños puedan ir solos a pie a la escuela. Son cosas que hacen que elijamos vivir en nuestro pueblo. Vamos a defender esto», afirmó la Intendenta Castagnino.
Es evidente que la colaboración entre los distintos niveles de gobierno y las fuerzas de seguridad es fundamental para enfrentar este desafío. Entre Ríos está decidida a protegerse y evitar que el crimen organizado se instale en su territorio. Con un plan de control exhaustivo y el compromiso de toda la comunidad, se espera mantener la seguridad y la paz en la provincia.
